Jugador del Pajarillos, San Ignacio y Betis C. F. de
Valladolid; jugador y entrenador del C. D. Cristo Rey; seleccionador provincial de Valladolid durante la temporada
1986/87, ha estado vinculado al Real Valladolid como ojeador desde 1970 hasta
2010.
Si
hay una labor, no siempre bien entendida en el ámbito del fútbol modesto, esta
es la del ojeador o descubridor de talentos, una misión que encarna como nadie
en nuestra ciudad Miguel Hernández Martín, quién pese a afirmar que “el fútbol
sea ingrato y lo más ingrato de todo sean los futbolistas, y pese a lo injusto
que es hacer depender tantas cosas del capricho de la pelota”, está convencido
de que el fútbol es uno de los fenómenos sociales y culturales más importantes
de los últimos cien años, haciendo posible que todas las naciones, “pese a sus
diferencias, hayan sido capaces de hablar un mismo idioma disputando el balón”.